La Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae) ha señalado que el crecimiento en el empleo autónomo registrado en abril respalda una tendencia positiva. No obstante, hay que tener en cuenta que este aumento está influenciado por la estacionalidad de la Semana Santa, un período que históricamente dinamiza la actividad en diversos sectores.
Datos positivos en el mercado laboral
De acuerdo a las cifras del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) incorporó 12.950 nuevos afiliados en abril. Esto hace que el total de trabajadores por cuenta propia alcance la cifra de 3.402.198. Estos datos representan un incremento interanual de 37.260 autónomos, lo que se traduce en un aumento del 1,11%. Uatae califica estas cifras como una confirmación de una tendencia que, aunque es alentadora, requiere un análisis más profundo.
El impacto de la estacionalidad
Sin embargo, desde Uatae se ha enfatizado que este repunte no es del todo representativo de una mejora estructural. “El aumento está ligado en gran medida a la estacionalidad de la Semana Santa”, indica María José Landaburu, la secretaria general de Uatae. Durante este período, sectores como la hostelería, el turismo y el comercio experimentan un crecimiento temporal en la actividad, lo que puede distorsionar la realidad del empleo a largo plazo.
Más que cifras, una realidad compleja
“Son buenas noticias, sí, pero no podemos quedarnos en los titulares”, advierte Landaburu. La realidad estructural de muchos autónomos sigue marcada por la inestabilidad y la falta de protección social. Estos trabajadores a menudo navegan en un mar de dificultades que no siempre se reflejan en los informes estadísticos.
La organización llama a reflexionar sobre la situación de este colectivo, que muchas veces se ve atrapado en un sistema de cotizaciones que aún necesita una profunda revisión. La falta de medidas adecuadas podría perpetuar una trayectoria de desprotección y vulnerabilidad para los autónomos, lo que invita a la reflexión sobre la viabilidad de sus proyectos.
Necesidad de cambios estructurales
Uatae ha instado a que los datos positivos deben ir más allá de las cifras y ser acompañados por medidas de calado. La organización defiende la implementación de un sistema de cotizaciones basado en ingresos reales. “Es indispensable avanzar hacia una mayor justicia contributiva y protección social para el colectivo”, aseveran desde la Uatae.
El camino hacia un sistema más equitativo no solo beneficiaría a los autónomos en términos de estabilidad, sino que también podría impulsar la economía en su conjunto. ¿No sería razonable que quienes contribuyen de manera significativa a la economía recibieran las garantías necesarias para desarrollar sus proyectos sin el riesgo constante de la inestabilidad?
La importancia de un apoyo sólido
Por lo tanto, es crucial que se fortalezcan los derechos de este colectivo y se establezcan políticas que les ofrezcan un respaldo real. Los autónomos son la columna vertebral de muchos sectores productivos y su bienestar es vital para el crecimiento económico. Invertir en su estabilidad y protección no solo es un acto de justicia, sino una estrategia inteligente para el futuro del empleo en España.
Desde la Uatae se hace un llamado a las autoridades para que tomen en cuenta estos cambios y se comprometan de manera decidida con el tejido empresarial que, aunque se muestra fortaleciendo, todavía enfrenta desafíos considerables.
La realidad es que, si bien los datos del empleo autónomo ahora parecen alentadores, el viaje hacia una situación más favorable aún tiene un largo camino por recorrer. Ajustar el sistema para que refleje las verdaderas necesidades de los trabajadores por cuenta propia es una tarea urgente y necesaria.