En enero de este año, un total de 50 trabajadores fallecieron en accidentes laborales, lo que representa un ligero descenso en comparación con el mismo mes del año anterior, donde se registraron 51 muertes. Esto implica una reducción del 2% en términos relativos, según los datos provisionales del Ministerio de Trabajo y Economía Social. Pero, ¿qué hay detrás de estas cifras? Vamos a desglosar la situación.
Causas de los accidentes mortales
Los accidentes mortales ocurridos en enero se clasificaron en varias categorías. Las condiciones de salud de los trabajadores jugaron un papel significativo, puesto que 21 de los fallecimientos fueron provocados por infartos y derrames cerebrales. También se reportaron 7 muertes en accidentes de tráfico y 5 por atrapamientos y amputaciones. Es crucial entender que estos incidentes pueden estar interrelacionados con las condiciones laborales y el bienestar de los empleados.
Por otro lado, un análisis más detallado refleja que los siniestros ‘in itínere’, es decir, aquellos que ocurren mientras los trabajadores se desplazan hacia sus lugares laborales, también tuvieron un impacto notable. En este caso, los accidentes con resultado de muerte aumentaron un 22,2%, alcanzando un total de 11 fallecimientos.
Tendencias en los sectores laborales
Si exploramos los datos por sectores, encontramos que el sector servicios fue el que más fatalities reportó con 18 incidentes mortales, aunque esto representa un decrecimiento del 25% en comparación con enero de 2024. A su vez, el sector industrial mostró una ligera mejora al registrar 3 fallecidos, uno menos que el año anterior.
Sin embargo, no todos los sectores mostraron resultados positivos. La construcción presentó una marcada alza en los accidentes mortales, con 16 fallecidos, lo que equivale a un incremento del 33,3% en comparación con enero del año anterior. En la agricultura, los números se mantuvieron estables con 2 muertes, idénticas a las del año pasado.
Incidencias de accidentes laborales
Una mirada más amplia a los accidentes laborales muestra que el índice de incidencia, que mide el número de accidentes con baja por cada 100.000 trabajadores, ha sufrido una disminución en casi todos los sectores, excepto en industrias extractivas, hostelería y actividades administrativas. Esto indica que, aunque haya menos accidentes fatales, otros sectores siguen enfrentando retos significativos en cuanto a seguridad laboral.
Los accidentes que resultaron en baja laboral también han mostrado una reducción, disminuyendo un 3,4% hasta totalizar 43.450 incidentes. De estos, 37.234 tuvieron lugar en los centros de trabajo, lo que representa un descenso del 4%, mientras que 6.216 accidentes fueron ‘in itínere’, aumentando en 0,4% en un año.
Diferencias entre asalariados y autónomos
Un aspecto interesante de las estadísticas es que, de los 50 trabajadores fallecidos en accidentes laborales, la mayoría, es decir, 49 eran asalariados, lo que representa un aumento del 6,5% respecto al año anterior. Por otro lado, solo 1 trabajador murió siendo autónomo, lo que equivale a una disminución drástica del 80% en comparación con el año pasado.
En el ámbito de los trabajadores por cuenta propia, se notificaron un total de 1.924 accidentes laborales con baja, reflejando una disminución del 19,5% respecto a enero de 2024. Esto incluye 1.777 incidentes en jornada laboral, lo que representa un descenso del 20,8%. En cuanto a los accidentes ‘in itínere’, los números se mantuvieron estables con 147 casos.
Accidentes sin baja laboral
Las estadísticas también destacan que, en enero, se notificaron 36.201 accidentes sin baja laboral, lo que supuso una caída del 6,8% en comparación con el año anterior. Estos datos ponen de relieve la importancia de seguir apostando por una mejora continua en las políticas de prevención de riesgos laborales.
En resumen, la disminución de accidentes laborales y el descenso en las fatalidades en algunas áreas ofrecen una luz de esperanza. No obstante, la preocupación por el aumento de siniestros en otros sectores, como la construcción, requiere atención inmediata. Como sociedad, es fundamental continuar trabajando por un entorno laboral seguro y saludable para todos.