Varios sindicatos representantes de los trabajadores públicos mutualistas saldrán mañana miércoles 11 de diciembre a la calle en defensa de Muface. Esta movilización se produce tras la primera licitación del concierto sanitario que quedó desierta, ya que las aseguradoras no se presentaron a la renovación del convenio al no considerar suficiente la subida de la prima propuesta por el Gobierno.
Convocatorias en Madrid y provincias
Los sindicatos CCOO, UGT, ANPE, Adide, USIE, UFP, SUP, Acaip y SIAT han convocado manifestaciones que tendrán lugar tanto en Madrid como en las provincias. En la capital, la primera acción comenzará a las 10.30 horas frente a la sede de Unespa, la patronal de las aseguradoras. Más tarde, por la tarde, entre las 17.00 y 18.00 horas, se concentrarán en la sede de Muface en Madrid y en sus respectivas delegaciones provinciales.
En un movimiento de solidaridad, los trabajadores públicos asistidos por Muface estarán acompañados por funcionarios de la Justicia de Mugeju, quienes también están enfrentando complicaciones en su prestación sanitaria. Así, la fuerza de la protesta se verá reflejada en la unidad de los diferentes sectores que dependen del servicio de salud.
Denuncias y movilizaciones adicionales
Adicionalmente, el sindicato CSIF también se ha sumado a la causa, programando una «gran movilización» para el próximo sábado 14 de diciembre. Esta se llevará a cabo en frente de la Dirección General de Muface en Madrid. El objetivo es claro: solicitar al Gobierno una nueva licitación que sea «suficientemente atractiva» para asegurar la continuidad del sistema sanitario.
El pasado lunes, CSIF alertó al Defensor del Pueblo sobre el retraso y la suspensión de citas médicas en Muface. Según sus denuncias, algunas clínicas están incluso cuestionando a los funcionarios sobre la posibilidad de que sufraguen sus propios tratamientos para ser atendidos. Esta situación, advierten, podría poner en riesgo la atención sanitaria de más de un millón y medio de funcionarios y sus familias.
El rol de las aseguradoras en la licitación desierta
El Gobierno había realizado una consulta a las aseguradoras para evaluar su disposición ante una nueva licitación. Las tres aseguradoras que hasta entonces ofrecían atención a Muface—Adeslas, Asisa y DKV—no se presentaron a la convocatoria para los años 2025 y 2026, ya que consideraron insuficiente la subida en las primas de 17,12% planteada por el Gobierno. Esta cifra estaba muy por debajo de lo que las aseguradoras demandaban, que era cercano al 40%.
A raíz de este fracaso en la licitación, el Gobierno abrió un plazo de diez días hábiles, desde el 21 de noviembre hasta el 4 de diciembre, para que las aseguradoras indicaran a Muface a qué precios estarían dispuestas a prestar el servicio sanitario. Este proceso incluía la indicación de las primas fijas que deberían abonar por cada grupo de edad en el nuevo concierto.
Según información obtenida, DKV ha manifestado que la prima por cada asegurado debería aumentar un 40,6% y pidió que los fármacos incluidos en el sistema público de salud no se incorporen al convenio actual, sino al siguiente. Adeslas, por su parte, ya había notificado que no se presentaría a la nueva licitación.
Compromisos del Gobierno frente a la crisis
Óscar López, el ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, ha asegurado que habrá una nueva licitación de Muface antes de que finalice el año. Esta declaración llega tras la preocupación manifestada por los mutualistas, quienes reciben la noticia con ansiedad respecto a su futuro sanitario.
El ministro también ha dado un mensaje de tranquilidad a los afectados, asegurando que la Ley de Contratos del Sector Público protege la asistencia sanitaria de los mutualistas. Esta ley contempla modalidades para prorrogar el concierto actual hasta que se resuelva el nuevo convenio, con el fin de garantizar que todos los mutualistas tengan el acceso necesario a sus servicios de salud.
Expectativas para el futuro del concierto sanitario
La situación actual pone de manifiesto la necesidad urgente de encontrar una solución que garantice la continuidad del servicio de salud para los funcionarios afectados. La colaboración de los sindicatos y la rapidez de respuesta del Gobierno jugarán un papel crucial en este proceso.
Mañana se podrán escuchar las voces de los trabajadores de Muface y de los funcionarios de la Justicia, exigiendo soluciones concretas. Estos actos de protesta son más que una manifestación; son un llamado a la acción para asegurar la protección de un sistema que afecta directamente a un gran número de personas en todo el país.