Durante un foro organizado por Infolibre, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se refirió al impacto de la nueva jornada laboral y a la necesidad de abordarla con urgencia. Díaz afirmó que existe un «empeño» entre todas las partes involucradas para llevar a cabo un acuerdo que permita la rebaja de la jornada laboral de las actuales 40 horas semanales a 37,5 horas en 2025. Sin embargo, consideró que la narrativa negativa que se está construyendo en torno a esta medida debería ser reconsiderada.
Minimizar el impacto para mejorar la calidad de vida
Yolanda Díaz subrayó que la rebaja de la jornada laboral tendría un impacto económico mucho menor que el aumento del salario mínimo interprofesional (SMI). Específicamente, señaló que este cambio originará un incremento en el coste laboral del 2,2%. Esta cifra es notablemente inferior al efecto que implicaría elevar el SMI, lo que ofrece un marco más accesible para las empresas y, a su vez, mejoraría la calidad de vida de los trabajadores.
La ministra hizo hincapié en el éxito del aumento del SMI en la economía española, lo cual ha favorecido a las familias. Este avance, al igual que la futura reforma de la jornada laboral, apunta hacia una mejora general en la estructura del mercado laboral del país.
Negociaciones complejas dentro del gobierno
Además, Yolanda Díaz reveló que la idea de reducir la jornada laboral provocó tensiones dentro del Gobierno de coalición. Detalló que «una parte» del gabinete no estaba de acuerdo con esta medida al inicio, lo que llevó a su intervención directa con el presidente, Pedro Sánchez. Este intercambio evidenció las diferencias de opinión dentro de la coalición, pero también la firmeza con la que Díaz ha defendido sus propuestas.
Díaz recordó un momento crucial en el debate electoral, donde Sánchez había manifestado dudas sobre el proyecto. Ella, con una postura firme, se comprometió a seguir adelante, generando un compromiso renovado en el Gobierno para abordar esta cuestión vital.
Compromiso del gobierno para la reforma
La titular de Trabajo también aseguró que, a pesar de las diferencias iniciales, el presidente Sánchez ha mostrado un compromiso «absoluto» con la reducción de la jornada laboral. Esta afirmación refleja su confianza en que esta medida no solo beneficia a los trabajadores, sino también a la productividad de las empresas y al bienestar general del país.
En un contexto cada vez más competido y demandante, la ministra de Trabajo cree que este tipo de reformas son necesarias para adaptarse a las nuevas realidades laborales y mejorar la vida de los ciudadanos. Contar con un gobierno que comparte este compromiso puede ser un factor decisivo para el éxito de la propuesta en el futuro.
El camino hacia la reforma del despido
Por otro lado, Yolanda Díaz también mencionó que la tan esperada reforma del despido se iniciará probablemente el año siguiente. Esto sucederá una vez que su Ministerio haya cumplido otras prioridades, como la creación de una herramienta enfocada en la salud laboral de las trabajadoras del hogar, así como la implementación del Estatuto de los Becarios y el Estatuto del Artista.
Este enfoque en la salud laboral refuerza la visión de un mercado de trabajo más justo y sostenible, y es un paso esencial en la construcción de nuevas normativas que se alineen con los estándares europeos.
Mirando hacia el futuro en la jornada laboral
Al finalizar su intervención, Yolanda Díaz se mostró optimista sobre el futuro del trabajo en España. La ministra resaltó que, con un enfoque en el diálogo social y en la alianza con patrones y sindicatos, se están trazando rutas que llevarán a un ambiente laboral más saludable y equitativo. La combinación de estas reformas puede transformar no solo la jornada laboral, sino también la calidad general del empleo en el país.
En definitiva, la implementación de estas medidas no solo marca un hito en la política laboral, sino que representa un reto y una oportunidad para reimaginar el trabajo en España, buscando un equilibrio que beneficie a todos. La ministra concluyó su exposición reiterando que, a pesar de los retos, el diálogo constante y el empeño por el cambio son factores clave para lograr un futuro más prometedor.
