El despliegue del nuevo sistema de cotización de autónomos en función de sus ingresos reales se encuentra en marcha y se extenderá hasta 2025. Este sistema, que fue acordado con las principales organizaciones de autónomos, comenzó su implementación a principios de 2023 y tiene un periodo de transición que se extenderá hasta el 2032. ¿Te imaginas cómo cambiarán las cuotas que los trabajadores por cuenta propia tendrán que abonar en función de sus ingresos? La respuesta es que variará significativamente.
Cuotas para 2025: reducciones en los tramos bajos
De cara a 2025, los autónomos que se encuentran en los tramos de menores ingresos verán cómo sus cuotas se reducen en comparación con este año. En concreto, para un autónomo que cotice por la base mínima y cuyos rendimientos netos oscilen entre menos de 670 euros al mes hasta 1.700 euros, las cuotas irán desde los 200 hasta los 294 euros. Este cambio es positivo para aquellos que están empezando o cuentan con ingresos más bajos.
Por otro lado, para quienes tienen mangas más holgadas en sus ingresos, es decir, aquellos con rendimientos netos superiores a 1.700 euros, la situación será diferente. Ellos verán cómo sus cuotas aumentan, alcanzando cifras que van de los 350 hasta los 590 euros mensuales dependiendo de su situación. Así que, dependiendo de tu cantidad de ingresos, la cuota a pagar puede variar bastante.
Los tramos de ingresos que se definen en este sistema son cruciales para entender cómo funcionará la cotización. Así, por ejemplo, los dos únicos tramos que no verán un incremento en su cuota mínima en 2025, en comparación con los años anteriores, son aquellos que reflejan rendimientos netos de entre 1.300 y 1.700 euros mensuales, que mantendrán una cuota de 294 euros al mes.
Flexibilidad en la cotización
Los autónomos disfrutarán de una flexibilidad notable en cuanto a la elección de su cuota. Podrán cambiar de tramo cada dos meses, lo que representa un total de seis cambios anuales. Este aspecto del nuevo sistema permite a los trabajadores ajustar su cotización a las previsiones de ingresos, adaptándose mejor a su actividad profesional a lo largo del año.
Además, los rendimientos netos, que se calculan restando de los ingresos todos los gastos necesarios para el ejercicio de la actividad, influirán en la base de cotización. Sobre esta cantidad, se aplicará una deducción adicional por gastos genéricos del 7%, o del 3% para los autónomos societarios. ¿Te imaginas cómo puede esto ayudar a los autónomos a tener una visión más clara de lo que deben pagar?
Otro elemento a tener en cuenta es que los autónomos deberán presentar a la Seguridad Social una previsión de ingresos para el año, aunque tienen la opción de ajustar su cotización hasta seis veces si experimentan cambios notables en sus ingresos. Este nuevo sistema busca ser más adaptable y justo.
Regularización de las cotizaciones
Una vez finalizado el ejercicio fiscal, es importante mencionar que se llevará a cabo una regularización de las cotizaciones. Esto implica que, en función de los rendimientos netos anuales definitivos, se devolverán o reclamarán cantidades si se produjeron variaciones respecto a las previsiones iniciales. Es una medida que busca asegurar que los autónomos paguen lo que realmente les corresponde, sin sorpresas al final del año.
De hecho, fuentes del entorno de los autónomos han indicado que ya se están empezando a enviar cartas a aquellos aproximadamente 700.000 autónomos que pagaron de más en 2023. Esto es resultado de un cruce de datos realizado con Hacienda para realizar una devolución de oficio. No obstante, es importante destacar que también tienen la opción de renunciar a esta devolución si prefieren mantener su cotización para mejorar futuras prestaciones.
Impacto del nuevo sistema en los autónomos
Según las estimaciones de la Seguridad Social, este nuevo sistema de cotización tendrá diferentes consecuencias para los autónomos. Aproximadamente uno de cada dos autónomos tendrá una cuota más baja que la que estaba abonando, mientras que el 25% verá incrementada su cuota y otro 25% permanecerá con la misma cantidad. En otras palabras, la distribución de las cuotas cambiará y será necesario hacer un seguimiento para comprender cómo impactará esto a cada grupo.
Esto es aún más relevante si consideramos que, con este nuevo sistema en marcha, cualquier persona dada de alta como autónomo, aunque solo sea por un día, estará obligada a realizar la declaración de la Renta. Anteriormente, solo aquellos que habían obtenido más de 1.000 euros de rendimientos netos estaban obligados a ello, pero ahora la norma se ha ampliado a toda la comunidad de autónomos.
Por otro lado, para aquellos que decidan iniciar un nuevo negocio a lo largo de 2025, seguirán teniendo la posibilidad de acogerse a la ‘tarifa plana’ de 80 euros mensuales durante su primer año de actividad, lo que les brinda un alivio económico en sus primeros pasos. Así que, si estás pensando en emprender, esta es una opción que no puedes dejar escapar.