Entre enero y noviembre del año pasado, 741 trabajadores perdieron la vida en accidentes laborales, una cifra alarmante que supera en 77 muertes a las registradas en el mismo periodo de 2023. Es evidente que estos números nos invitan a reflexionar sobre la seguridad en el ámbito laboral y las medidas a implementar para detener esta tendencia trágica.
Proyección alarmante para 2024
La Unión General de Trabajadores (UGT) ha expresado su preocupación por este aumento y prevé que, de continuar así, 2024 podría cerrarse con más de 800 fallecidos en accidentes laborales. El sindicato considera que esta situación es insostenible para la sociedad española y exige medidas urgentes para poner fin a esta lacra. Con el objetivo de llamar la atención sobre esta grave problemática, UGT enfatiza la necesidad de una respuesta enérgica que prevenga futuras muertes.
Causas recurrentes de siniestralidad
En su análisis de los datos, UGT ha señalado que las principales causas de estos accidentes son «viejas conocidas» que se repiten de manera constante. Hasta noviembre, se contabilizaron 246 muertes por infartos y derrames cerebrales; 93 por atrapamientos, aplastamientos y amputaciones; 87 por caídas; y 83 más por accidentes de tráfico. Estos datos revelan la urgencia de implementar medidas efectivas, ya que muchas de estas causas son prevenibles. Sin embargo, el sindicato denuncia una falta de cumplimiento en materia de prevención por parte de las empresas, lo que agrava la situación.
Aumento significativo en sectores específicos
Los datos provisionales del Ministerio de Trabajo indican un aumento del 12% en los accidentes mortales ocurridos durante la jornada laboral en comparación con 2023, con un total de 599 fallecidos. Cabe destacar que el sector de servicios es el que más fallecidos ha registrado, con 299 muertes, lo que supone un incremento del 18,2% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Además, el sector de la construcción reportó 128 fallecimientos, y la industria registró 110 muertes, lo que representa un aumento del 19,6%.
Sin embargo, en el campo de la agricultura, se observó una disminución en el número de accidentes mortales, con 62 fallecidos, lo que representa ocho menos que en el mismo periodo de 2023.
Incremento de accidentes ‘in itínere’
Paralelamente, los siniestros ‘in itínere’ —aquellos que se producen en el trayecto hacia el trabajo o de regreso a casa— también experimentaron un aumento destacable. En 2024, se reportó un incremento del 10,1%, con un total de 142 fallecidos, 13 más que en el mismo periodo de 2023. En conjunto, los accidentes con baja laboral aumentaron un 0,3% hasta noviembre, alcanzando un total de 583.338.
En la clasificación de accidentes graves, hasta noviembre se contabilizaron 3.486 en jornada laboral, lo que representa un ligero aumento del 0,1%. En contraste, los siniestros ‘in itínere’ de carácter grave aumentaron un 10,5%, alcanzando un total de 959.
Preocupante cifra de autónomos afectados
En cuanto a los trabajadores autónomos, la estadística revela que de los 741 fallecidos en accidentes laborales, 679 eran asalariados, mientras que 62 eran autónomos. Aunque esta cifra de autónomos representa una leve mejora—ocho muertes menos que en 2023—, es igualmente preocupante. De estos 62 autónomos fallecidos, 57 murieron en su centro de trabajo.
También es importante destacar que, hasta noviembre, los trabajadores por cuenta propia sufrieron un total de 30.514 accidentes laborales con baja, lo que indica una disminución del 4,6% en comparación con el año anterior. Esta bajada se observaría tanto en los accidentes ‘in itínere’ como en los siniestros producidos durante la jornada laboral.
UGT exige un plan de choque contra la siniestralidad
La UGT considera que es imperativo negociar un plan de choque contra la siniestralidad laboral, que contemple medidas para mejorar la gestión de los riesgos psicosociales en las empresas. Según el sindicato, los infartos y derrames cerebrales son la causa principal de muerte en el trabajo, lo que subraya la necesidad de un enfoque renovado hacia la prevención.
Además, UGT ha hecho un llamado para reanudar los trabajos de la mesa de diálogo social sobre prevención de riesgos laborales, a fin de actualizar la normativa en este ámbito. Reivindican también un aumento de recursos humanos y materiales para la Inspección de Trabajo, buscando reforzar el control sobre el cumplimiento de las normativas preventivas.
Por último, la UGT propone que se consideren alternativas para mejorar la fiscalización, como habilitar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para actuar como auxiliares en la verificación del cumplimiento preventivo en situaciones de infracción grave. Esto podría ser un paso más hacia asegurar un entorno laboral más seguro y saludable.
La situación que enfrenta el sector laboral en España es alarmante y requiere de la participación activa de todos en la implementación de soluciones efectivas para prevenir pérdidas humanas en el trabajo.