El presidente de la organización de autónomos ATA y vicepresidente de la CEOE, Lorenzo Amor, ha realizado una drástica valoración sobre el panorama laboral en 2024, enfatizando que la creación de más de medio millón de empleos ha beneficiado a las grandes y medianas empresas, así como al sector público. Sin embargo, este crecimiento no se ha reflejado entre los autónomos y las pequeñas empresas, que han visto una disminución en la oferta de empleo.
La situación de los autónomos en cifras
«Hay 50.000 autónomos y empresas empleadores menos que en el año 2019″, afirmó Amor en un análisis reciente de los datos de afiliación y desempleo. Este descenso es preocupante si consideramos que la pérdida de más de 50.000 empleadores implica un retroceso notable en el tejido empresarial de base, fundamental para la economía local.
Amor también destacó el aumento de 42.000 trabajadores autónomos afiliados a la Seguridad Social en 2024. Este incremento ha sido impulsado, sobre todo, por las comunidades autónomas de Madrid y Andalucía, que han concentrado más de la mitad de este crecimiento. Sin embargo, deben tenerse en cuenta las bajas en otros sectores que reflejan una tendencia negativa en el conjunto del sistema.
Destrucción de empleo en sectores clave
En el análisis de los distintos sectores económicos, Amor hizo hincapié en «la sangría» que ha continuado en el comercio, donde se perdieron casi 9.000 autónomos en 2024. Adicionalmente, la industria registró 2.300 bajas y en la agricultura, cerca de 3.700. Estas cifras son alarmantes y revelan un impacto significativo en la capacidad de estos sectores para mantener y generar empleo.
Pero, ¿cuáles son las consecuencias de esta situación? El presidente de ATA advierte que, si esta tendencia persiste, podríamos enfrentar un menor crecimiento del empleo en 2025, acompañado de una nueva ola de destrucción de puesto de trabajo, especialmente entre las pequeñas empresas y autónomos. Esta perspectiva resulta inquietante para muchos.
El futuro incierto para la creación de empleo
Amor también pronosticó que «se creará empleo, pero estimamos que será prácticamente la mitad del que se ha creado este año». Para contextuar aún más esta afirmación, en el caso de los autónomos, podría haber un crecimiento de entre 20.000 y 25.000 autónomos, pero nuevamente, esto representa prácticamente la mitad del crecimiento registrado en 2024.
Además, se prevé que se pagarán más cotizaciones gracias a la cuota de solidaridad y al Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), mientras que la jornada laboral se reducirá. Estas medidas no ayudan a fomentar un entorno de confianza para el crecimiento de los pequeños negocios y los autónomos, que cada vez sienten más presión económica.
Apoyo a los autónomos: una necesidad urgente
El mensaje de Amor es claro: «Hay que apoyar a los autónomos, a las empresas, a los creadores de empleo, y no ponerles trabas». La creciente carga administrativa que enfrentan estos empleadores no solo supone un obstáculo, sino que también puede frenar la capacidad de generación de empleo en el futuro. ¿Por qué en lugar de simplificar trámites se incrementa la carga hacia quienes generan empleo?
Actualmente, muchos autónomos se encuentran en una situación difícil. La presión económica y la incertidumbre del entorno laboral hacen que sea más difícil para ellos sostener y expandir sus negocios. La falta de un apoyo consistente puede llevar a una espiral descendente que afectará no solo a los autónomos, sino también a la economía en su conjunto.
En resumen, la situación del empleo en España revela contrastes significativos entre los sectores y tipos de empresas. Mientras las grandes y medianas empresas parecen beneficiarse, los autónomos y pequeñas empresas luchan por sobrevivir. Si no se toman medidas efectivas para apoyar a estos empleadores, podríamos enfrentar un futuro laboral más incierto y menos prometedor.