Un total de 664 trabajadores han perdido la vida en accidentes laborales durante los primeros diez meses del año, lo que representa un aumento de 62 muertes en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este incremento del 10,3% ha sido destacado en los datos provisionales del Ministerio de Trabajo y Economía Social. Estos números son alarmantes y han generado preocupación en diversos sectores de la sociedad.
Aumento de muertes en jornada laboral
De acuerdo con las estadísticas del Ministerio, el número de accidentes mortales durante la jornada de trabajo ha subido un 8,8% en comparación con el mismo periodo del año pasado, registrando un total de 533 muertes. Esta cifra incluye 43 fallecimientos más que en 2023. En términos de accidentes ‘in itínere’, que son aquellos que ocurren durante el trayecto hacia o desde el trabajo, se ha observado un incremento del 17%, alcanzando los 131 fallecidos, cifra que se traduce en 19 muertes adicionales respecto al año anterior.
Dentro de los accidentes mortales en jornada laboral, el sector de servicios ha sido el más afectado, generando el mayor número de fallecidos con 270 víctimas, cifra que representa un inquietante aumento del 14,4% en relación con el mismo periodo de 2023. Además, el sector de la construcción ha contabilizado 115 muertes, aumentando en 9 su cifra de fallecimientos (+8,5%). Por su parte, la industria también ha visto un incremento con 96 muertes, que son 11 más que en el año anterior (+12,9%).
Menos accidentes mortales en la agricultura
Sin embargo, la agricultura parece haber registrado cifras más alentadoras, con 52 fallecidos, lo que representa una disminución de 11 muertes (-17,5%) en comparación con el mismo periodo de 2023. Esto sugiere que, a pesar de las preocupantes tendencias generales, hay algunos sectores que están mejorando en términos de seguridad laboral.
Por otro lado, es fundamental tener en cuenta que, de los 664 trabajadores fallecidos, 608 eran asalariados, lo que se traduce en un aumento de 69 muertes (+12,8%). Entre ellos, 56 eran autónomos, lo que indica una disminución de 7 muertes en comparación con el año anterior (-11,1%). En este contexto, es alarmante que los infartos y derrames cerebrales hayan sido la principal causa de muerte en el trabajo, con 222 accidentes, lo cual podría estar relacionado con la exposición a riesgos psicosociales.
Accidentes laborales y baja laboral
En relación a los accidentes laborales, el número total de estos incidentes se ha elevado a 530.675 hasta octubre, lo que conlleva un incremento del 1% en comparación con el mismo periodo de 2023. De esta cifra, 457.045 ocurrieron en el centro de trabajo, lo que representa un aumento del 0,5%; mientras que los accidentes ‘in itínere’ han sufrido un avance del 4,1% alcanzando los 73.630.
La estadística también destaca que los accidentes graves en jornada laboral alcanzaron hasta octubre un total de 3.171, lo que supone un aumento del 2%. En cuanto a los siniestros ‘in itínere’ de carácter grave, estos se incrementaron un 13,5%, totalizando 892 casos. Por otro lado, los accidentes leves en jornada de trabajo igualmente subieron un 0,5%, totalizando 453.341, mientras que los accidentes ‘in itínere’ clasificados como leves se elevaron un 4% hasta las 72.607.
UGT lamenta las cifras y exige medidas
El sindicato UGT ha manifestado su descontento ante lo que consideran «cifras inaceptables» de mortalidad. Este hecho ha conducido a una solicitud urgente de un Plan de Choque contra la siniestralidad laboral en la Mesa de Diálogo Social de prevención de riesgos laborales. ¿Qué medidas se proponen? Entre las recomendaciones incluyen mejorar la gestión de los riesgos psicosociales en las empresas.
Además, han sugerido aumentar los recursos humanos y materiales para la Inspección de Trabajo, así como incrementar los recursos destinados a la Fiscalía de Siniestralidad Laboral. También abogan por la creación de juzgados especializados en seguridad laboral y la figura de un delegado territorial de Prevención de Riesgos Laborales a nivel estatal. Mientras estas medidas no sean implementadas, han solicitado que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado actúen como “auxiliares” de la Inspección de Trabajo.
La situación es preocupante y demanda una atención inmediata. Con un panorama de 664 víctimas mortales, el tiempo para actuar es ahora. La salud y seguridad en el trabajo no solo son derechos, sino una necesidad urgente que debe ser priorizada por todos los sectores involucrados.